Cuantas veces te insinué
que yo te quería,
mil veces te miré
mientras tu boca reía.
Cuantas veces te seguía
por aquellas escaleras,
y tú sólo mirabas y reías.
Pero cuando nos enfrentamos
sólo nuestras miradas hablaron,
y entonces aquel día
quedó marcado en mi vida.
Hoy solo recuerdo tu nombre
con aquella imagen de alegría,
y pienso que al volver a verte
mí mirada nuevamente
en ti se fijaría.
Vanesa Insaurralde
Otro bello poema, algo melancólico, pero muy apasionado.
ResponderEliminar¡Melancólico, bueno! Felicidades Vanesa, es un exquisito poema.
ResponderEliminarGracias a ambos!! es bueno saber que aunque disten las opiniones,es bueno generar emociones...
ResponderEliminar¿ese es el cometido no?.
Un saludo!
Yo también te felicito tocaya, te quedo bonito.
ResponderEliminarmiradas que hablan y dicen tanto...
ResponderEliminarMuy hermoso y con mucho sentimiento, es un gran poema, un saludo.
ResponderEliminarMe gusta, mucho, como todo lo que escribe Vanesa. La idea es bien conocida, creo que a todos nos ha pasado alguna vez el ver un rostro particular entre la multitud, o seguir con la mirada a alguien en muchas ocasiones... (también me recuerda un poquito a "You're Beautiful de James Blunt"). Excelente poema. Gracias, Vanesa!
ResponderEliminarDestino? Atracción inexplicable por otra persona. Suele pasar pero no suele ser tan bellamente retratado. Enhorabuena Vanesa
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