Siento
el corazón chiquito, estrujado, exprimido,
dejando
más espacio en el vacío,
viviendo
de una espera,
de una larga añoranza,
de un
deseo insaciable,
tratando
de acortar en la distancia,
ese día que no llega,
mientras
el tic tac del reloj,
hace
más doloroso el discurrir del tiempo.
Mi
corazón se sienta a mirar tristemente
la
soledad que me sumerge en el hastío.
Siento
el corazón como una pasa, fruncida arrugadita,
la
sensación de dolor me ensancha el pecho,
me
cuesta respirar,
por
mis ojos se cuela la explosión de una pena
que
confiesa que no todo en la vida se nos da.
¡La
felicidad es una mariposa que nos da colorido en sus visitas!
¿Siento
el corazón?, creo que no
solo
queda el espacio donde estuvo.
Se fue
al encuentro del que había perdido
y hoy
esta confundido con el tuyo.
Trina Leé de Hidalgo
Un bello y nostálgico poema. Muy bello, ¡enhorabuena!!!!
ResponderEliminarprecioso poema al desamor
ResponderEliminarTriste pero lleno de sinceridad y sentimiento.
ResponderEliminarMUCHAS GRACIAS A ANGUSTIAS, NURIA Y JUAN CARLOS, por leerme. comentar y dedicarme parte de su tiempo. Un placer contar con ustedes.
ResponderEliminarTRINA
Bonito y sincero Trina, qué haríamos nosotros, si no sintiéramos dentro toda esta suerte de sentimientos tan poderosos, no podríamos escribir nada ¿verdad?. Para poder escribir cosas como éstas, primero hay que sufrirlas (lamentablemente)
ResponderEliminarMagistral, amiga. ¿Por qué resultará tan terapéutica la poesía para el dolor?
ResponderEliminarNo soy mucho para la poesía pero esta bueno. Porque no hay nada peor para el corazón que el mal de amores y los enredos. Felicidades.
ResponderEliminarla desolación de algo que no se pudo dar, siempre deja ese vacío que se nos clava en el alma y en la piel... triste, nostálgico y trasmite el sentimiento... buen poema ! saludos!
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