En
síntesis, que contento o bajoneado, siempre fui muy entusiasta, rebosando
energía. Al igual que "Las Divinas de Patito Feo, yo fui PURA GASOLINA.[i]
Sin
embargo, ahora me encuentro escuchando "The Blower´s Daughter"
de Demian Rice (tema melancólico si los hay), justo cuando acabo de leer
tu Blog. Después de tus últimos tres o cuatro posteos que he leído en él, creo
que nuestra historia ya fue. Contigo había sacado mi coraza, mi personaje. Y
hasta llegué a pensar que esta vez sería
diferente.
Pero,
al fin y al cabo ¿Cuántas veces pensé que iba a ser diferente? Que quede claro
que rompí mis estructuras e intenté construir un puente entre nosotros, un
puente que uniera los 1000 Kilómetros que nos separan. Pero creo que, después
de todo lo que leí, este puente tiene una sola mano. Además, en la simbología
Jungiana, el puente es sinónimo de malas noticias.
Contigo
le dije Adiós a mi apartamento de Palermo Soho; contigo, "estrené” el
nuevo apartamento en Colegiales[ii].
Para mí, eso era una señal...
Y
si, debo admitirlo aunque me cueste: muchos me podrán llamar “El Rey Del
Hielo”, pero debajo de mi fachada dura y distante se esconde un romántico
empedernido, una especie de Danielle Steel[iii]
del Mundo Corporativo.
Lo
peor fue notar cierto dejo de fastidio en tus palabras, en esos escritos, y
sobre todo, una dura lección para mi narcisismo: Pensé que yo había sido
especial para ti.
Quizás,
el día que quiera dejar de ser especial en la vida de los demás, el día que
quiera dejar de brillar, de sacarme todo el polvo de estrellas y el rutilar,
logre encontrar a alguien que me guste y que además, me ame.
Ya
estoy harto de ser un polvo más o "un amigo con derecho a roce”. Además de
follar, merezco ser amado. Pensé que esta vez, contigo, sería diferente. Pero
me equivoqué.
Termino
con una frase de un clásico del cine de los años 80 "El Primer Año el
resto de Nuestras Vidas" (donde daba
sus primeros pasos una entonces desconocida chica llamada Demi Moore)
"Pensaron que su amistad duraría para siempre, pero "siempre"...no duró".
Lo
mismo pasa con mis amores.
¡Hasta
la próxima!
Por Gontxu Morán
¡ Las
Divinas” : personajes de un programa de TV argentino llamado “Patito feo” donde
el grupo de “Las Divinas” –compuesto por todas niñas pijas que eran las más
populares del Instituto-cantaban su canción emblema, uno de cuyos versos decía:
“Nadie pasa de esta esquina/Aquí mandan LAS DIVINAS/Somos pura gasolina/
Gasolina de Verdad”
dura realidad, da para pensar.
ResponderEliminarSi Nuria, la realidad de hoy es así, te enteras de que te han dejado por un post en un Blog o por un mensaje de texto...o por Twitter!
ResponderEliminarY gracias por tomarte el trabajo de leerme. Sé qué mi estilo es MUY DIFERENTE a lo que se escribe aquí,ya que mayormente me gusta escribir tipo artículo, pero para el próximo número ya vengo cocinando un relato/novela en entregas.
Ah, la tecnología y la globalización. El relato es triste pero realmente significativo. Te recuerdo otra frase célebre: ¡No somos nadie!...
ResponderEliminarGracias,Faustino.La tristeza se agrava cuando la gente ni siquiera da la cara.
ResponderEliminarLa verdad, yo considero que la tecnología avanza y debemos ajustarnos a ello. Aunque suena frío e impersonal, es más rápido (y barato) escribir un mensaje de texto que expresarse. Xq así evolucionan las cosas.
ResponderEliminarMe encanta ese sabor amargo. No sé por qué, pero en relatos o escritos sentimentales, siempre disfruto más con un final amargo que con uno azucarado. Será mi carácter, pero el texto me ha satisfecho. Enhorabuena por la calidad con que escribes, amigo.
ResponderEliminarME ENCANTÓ ESTE RELATO ORIGINAL, CONCISO, PRECISO, DIRECTO, Y A LA VEZ, JOCOSO. Por si solo, se convierte en una fuente de motivación para desear llegar hasta el final.La vida es ingrata, nunca terminamos de conocer a muchas personas y los sueños, en algunas oportunidades, se rompen antes de empezar a volar y entonces nos vemos sumergidos en decepciones que se deben olvidar para dar paso a nuevas oprtunidades, algún día será la vencida. Felicitaciones.
ResponderEliminarTRINA LEÉ DE HIDALGO