Dedicarse a la literatura es enfrentarte a un mundo de
ilusiones y ligeras decepciones.
Es
crear historias que en ocasiones son tan reales, que quien las lee, no sabe diferenciar,
que es ficción y qué realidad.
Empecé
a escribir siendo muy niña. Mis primeros cuentos, lo escribí cuando tenía diez años. Y ahora tengo treinta y siete años.
He tenido temporadas en que me he alejado de escribir porque siempre pensé que nunca lograría emocionar con ninguna de mis palabras.
He tenido temporadas en que me he alejado de escribir porque siempre pensé que nunca lograría emocionar con ninguna de mis palabras.
Siempre
tuve un diario donde escribía todo lo transcurrido a lo largo del día, pero
solo eran esos, sentimientos, que se quedaban encerrados bajo llave.
En
mil novecientos noventa y ocho de nuevo volvió en mi la pasión de escribir, y de una manera incipiente.
Porque no necesitaba días y días para escribir una historia. De repente sentía
que tenía que escribir y escribir hasta gritar lo que en mi interior había.
De
nuevo paré, porque siempre hay "amigos" que te dicen que es una
bobada escribir, que para qué. Que de ello no se come. Cierto es que no se come
con ello. Pero a mi, me alimenta el alma.
Y
fue de nuevo en octubre del dos mil once cuando he regresado y para quedarme dentro del
mundo de la literatura. Durante años la literatura y yo hemos sido amantes,
quizás he querido engañar mi amor hacia ella, por timidez, por vergüenza, qué
se yo por qué.
El
caso es que a día de hoy y hasta que la muerte me separe de ella, seguiré
escribiendo, hasta exhalar mi último aliento.
Hoy
es un día especial para mí, otro reconocimiento más en mi corta vida de
escritora, o creadora de historias. ¡Es tanto el respeto que le tengo a la
palabra antes mencionada!
Es
un honor para mí recibir este diploma, del "Círculo mundial de escritores
e intelectuales". Un tercer puesto que os aseguro que me hace muy feliz.
Os
dejo el link, que os derivará a la primera entrevista que me han hecho.
Una
vez me preguntaron: —Eva, ¿qué es para ti escribir?—. Aquí, en estas líneas
está la contestación a lo que es su día no supe qué decir—.
Es una premiación no sólo al TALENTO si no a la CONSTANCIA, A LA PASION POR LO QUE SE HACE, a la disciplina, al esfuerzo de lograr llegar a los lectores, envolverlos y atraparlos, como en tu caso Eva Maria que les ACARICIAS EL ALMA. Y tanto tú como tus otros compañeros galardonados son unos excelentes referentes.
ResponderEliminarConcurso en el que participaron de todas partes del mundo
Muchas gracias, Cristina. Seguiré luchando por estar a la altura de la premiación que me habéis otorgado. Un saludo.
EliminarExcelente Eva...Felicidades!!!!!
ResponderEliminarMuchas gracias, Hollman. Me alegra saber que compartes mi felicidad.
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