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viernes, 30 de agosto de 2013

Al azul


Llego a ver azul en los ojos como agua clara en remanso de paz,
Como mente tranquila en pos de la anciana sabiduría
Que desarma y da fatigas al ingenuo y su necedad…
Azul desde muy lejos, siempre azul, y que
Como una burbuja da oxígeno y se está cubierto
(Pero no da pinchazos ni alguno sufrimiento)

El Reino de los cielos es azul, que muy pocos conocemos.
Azul es eterno, azul es nostálgico,
Azul es el color del Nazareno
Y su pesado cargo y manto de pétalos.
En lo azul vive el hijo al que todos queremos
O secretamente anhelamos,
Y viven generaciones de vivos, a los que vemos.


Todo se ve, al contemplar un azul sereno.
Y a veces se ve en unos ojos un azul con la inmensidad del universo.
Pueden verse también lejanos, allá azulados, sagrados,
En ellos nuestro cielo buscamos, por ellos creemos,
En ellos nos perdemos y en ellos nos encontramos.

“Azul es lo incierto, ciertamente asegurado.”


María José Cabuchola Macario
  

6 comentarios:

  1. Me ha recordado un momento infantil. Un alumno de Lengua Española garabateó unas líneas y se convenció que podía hacer versos. Ni lo imaginaba. Los guardo como un tesoro, entre paños. Son más valiosos que el oro verbal con que los chatarreros parlamentarios pretenden daros el cambiazo en la conversación diaria. Y los locutores y periodista de cualquier medio que dicen informativo, con idioma sacado de sus cloacas, vendido al mejor postor…
    Me da pena enfrentar tanta inocencia a esa jauría desalmada. Casi me siento obligado a pedirles permiso a esos letrados de muladar, catedráticos de ocasión, que así usan las enseñanzas de cierto correctamente trasmitidas.

    “El día se muestra oscuro,
    viste el campo blanca seda,
    sopla la brisa morada,
    los árboles se menean." (1966)

    El profesor de Lengua me la dio por buena. Mi pecho se hinchó como si hubiera ganado un concurso. Y así había sido: Había descubierto mi propia valía. Continúan media docena más de versos refridos al día gris.
    “Si ser escritor es decir cosas con un bolígrafo, puedo serlo.” Así quedó anotado. Y me quedé tan ancho.
    “Sí, han de aclarar algo, al menos por sí mismos. Aunque solo reflejen el interior de mi espejo. O regale ayuda a quien lo tenga bruñido. Y aunque hechos de silencio necesario, que anuncien gritos rebeldes en la paz del hogar. O de una biblioteca. Que enseñen a superalos continuamente por quien lo intente.”
    El caso es que lo escrito barnice de color el ánimo que se acerque y lo comprenda, sorprendido del cielo azul, de la nieve blanca o la falta de posibles sentimientos anunciados en el texto leído.
    Mi cielo dibujado no era azul pero el suelo cubierto de nieve, aquel día acabó en sol, contempló el nacimiento de una oportunidad: decir algo con diferente grafía. De lo que no puedo responder es de su ventaja.



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  2. Nunca pensé que un color pudiese significar tantas cosas, que pudiese imprimir carácter a tanto pensamiento. Muy interesante, reflexionaré sobre ello. Me ha gustado mucho. Felicidades

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  3. Coincido en la fuerza del azul, pocos colores habrán inspirado tanto en la poesía.

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  4. muy lindo, el azul.. recuerdo mi último camping cuando a medio día después de la larga caminata, me sentaba al lado del río y observaba ese inmenso azul de cielo... absorbente e impresionante... una excelente reflexión! Saludos!

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  5. Me gusta esta prosa, el azul se convierte en fuente de inspiraciòn para el poeta, empezando porque hablamos de sueños azules, felicitaciones, espero seguir leyèndote.
    Azul del embeleso
    que me atrae e incita... asì empieza uno de mis poemas...
    Con afecto


    TRINA


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  6. El mundo de los colores siempre nos llena de cosas, de emociones, de situaciones, en definitiva de recuerdos... me ha gustado mucho, un abrazo

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